Mediante talleres, testimonios personales y un profundo diálogo con los adultos, unos 600 jóvenes quisieron demostrar, y demostrarse, que una revolución ya está en marcha.
¿Alguien sabe de qué va esto? ¿Qué vamos a hacer aquí? ¿Qué es eso de Positive Revolution? Con estas preguntas comenzaba la jornada que el 29 de enero llenó de expectativas, de sueños e ideales el colegio Sagrada Familia de Moratalaz, en Madrid. Allí casi 600 jóvenes entre los 14 y lo 28 años compartieron un mismo objetivo: construir un mundo mejor, más positivo, más unido. Suena a topicazo, ¿verdad? Pues sí, pero no lo es. ¿Cómo?, ¿que no se lo creen? Lean, entonces…
Un joven que venía por primera vez a una jornada como ésta organizada por el Movimiento de los Focolares decía: «¡Ha sido una experiencia nueva y además bastante diferente a todas en las que había participado en otros momentos de mi vida. Conocer gente nueva de diferentes sitios de España, jóvenes que como yo, quieren un mundo diferente. ¡Espero repetirla!». Otro, también primerizo, afirmaba: «¡El mensaje que nos han transmitido es una revolución! Cambia todo. En ese encuentro lo más importante ha sido la gente que he encontrado en los talleres, en la sala...».
La jornada comenzaba a las 12 de la mañana. Un goteo incesante de gente llegaba al colegio: un autobús de Toledo, otro de Andalucía, grupos que venían en coche desde Barcelona, Valencia, Zaragoza, Huesca, Murcia, País Vasco… De todas partes, vaya, abarrotaron el patio del colegio. A las 13.00h una gran expectación inundaba el salón de actos. Una breve presentación, dinámica, moderna, llena de música y baile conquista a los asistentes…
«Impactante, novedoso. En estas horas yo he mejorado...»; «Muy bien y muy divertido. Ahora volveré al cole y en algunas cosas que haga pensaré: esto lo hago por amor». Y es que ése era el propósito para vivir todo el día juntos.