
Pedro Crisólogo
Los datos conocidos sobre la vida de Pedro Crisólogo son muy escasos.
Nació hacia el 388 y fue nombrado metropolita de Rávena -en aquel entonces capital del Imperio de Occidente- entre el 425 y 429. Se hizo célebre por sus homilías, que le valieron el título de Crisólogo (palabra de oro).
Como todos los Padres, Pedro dominaba y utilizaba abundantemente la Sagrada Escritura en sus homilías, explicándola al pueblo con un calor humano y un fervor divino que penetraba en la vida de los fieles.
La riqueza dogmática y ética de su predicación, por otra parte, le ha merecido el título de Doctor de la Iglesia.