Continuamos con la publicación de un conjunto de cartas, en su mayoría inéditas, escritas por Chiara Lubich entre los años 1943 y 1949, cuando empezaba a perfilarse ese nuevo estilo de vida cristiana que configuraría su espiritualidad: el Ideal de la unidad.
Esta carta que Chiara Lubich escribió en la primavera de 1944 (el 16 de abril) está dirigida a Elena Molignoni, una joven de Castello di Ossana (Trento), pueblo en el que Chiara estuvo como maestra durante el curso 1938-39. Elena participaba en las reuniones del grupo de Acción Católica que Chiara fundó allí, animada por el párroco de entonces.
En 1944 Chiara se encontraba en Trento. La guerra arreciaba y Chiara estudiaba filosofía por su cuenta siguiendo el programa de la Universidad de Venecia, en la que estaba matriculada, ya que no podía asistir a las clases.