Congregación Salesiana: 150 aniversario
Eugenio González, SDBDon Bosco empezó su obra en los suburbios de Turín, norte de Italia, en plena revolución industrial a finales del siglo XIX, dedicándose a los niños y jóvenes más pobres y abandonados. En esta ciudad desarrolló gran parte de su fecundo apostolado. Su lema educativo fue formar “buenos cristianos y honrados ciudadanos”; unir estas dos realidades.
En este año 2009 se celebran dos efemérides salesianas: los 75 años de la canonización de san Juan Bosco y los 150 años de la fundación de la Congregación Salesiana. Son dos fechas importantes para la Familia Salesiana. De hecho, el superior general y sucesor de san Juan Bosco, el mejicano Pascual Chávez, ha definido 2009 como un “Año de Gracia” para su familia religiosa. La razón está en que ambas efemérides nos invitan a volver a Don Bosco, a mirarlo de nuevo para seguir actualizando en el mundo de hoy su carisma y su estilo pedagógico.
La canonización tuvo lugar en Roma el 1 de abril de 1934, domingo de Pascua de Resurrección, por el papa Pío XI, que ya lo había beatificado años antes. Aquiles Ratti, que así se llamaba Pío XI, conoció a Don Bosco y su obra cuando todavía era un joven sacerdote, y le llamó la atención gratamente la labor y santidad de aquel sacerdote turinés. En la homilía de la canonización así lo recordó ante miles de personas de todo el mundo que abarrotaban la Basílica y la Plaza de San Pedro. El nacimiento de la Sociedad Salesiana se remonta al 18 de diciembre del 1859. Era ya anochecido cuando Don Bosco se reunió con un buen grupo de colaboradores, muchos de ellos muchachos recogidos por el santo años antes. Dice el acta: “Pareció bien a los congregados organizarse en Sociedad o Congregación, que juntamente con el fin de una recíproca ayuda para la santificación propia, se propusiera promover la gloria de Dios y la salvación de las almas, especialmente de las más necesitadas de instrucción y educación…”.
Hace 128 años llegaba la primera comunidad salesiana a España, en concreto a la sevillana Utrera. Allí empezó un servicio que se ha revelado fructuoso a lo largo de todo este tiempo. El carisma salesiano se ha enraizado fuertemente en esta tierra. Hoy unos 1.300 salesianos consagrados repartidos en 155 comunidades religiosas, además de numerosas fuerzas de las demás ramas de la familia salesiana, siguen trabajando en el servicio de la educación, la promoción y la evangelización de los jóvenes, especialmente de aquellos que más dificultades tienen. 100 colegios y 36 centros de formación profesional, que atienden a más de 120.000 alumnos, principalmente de las clases populares, y 96 parroquias son los destinatarios que configuran la España salesiana.
Pero hay otras labores que también realiza la congregación. Los Oratorios Festivos, hoy centros juveniles, están en casi todos los colegios y las parroquias salesianas. En ellos se trata de acompañar a los jóvenes en esos tiempos y espacios informales para que también ellos sean factores de conquistas de auténticas libertades a través del deporte, la música, el teatro, etc. Se privilegia también la promoción de la formación de animadores, monitores y directores de tiempo libre a través de cursos y cursillos de calidad.
