Es una emergencia internacional. A los venezolanos les falta hasta lo más básico. La inanición comienza a hacer mella en una población que grita: ¡Ayuda!
Venezuela atraviesa uno de los periodos más negros de su historia. La economía lleva cinco años en recesión y ha batido todos los récords de inflación mundial. La falta de alimentos afecta especialmente a los más pequeños, que muestran preocupantes índices de malnutrición. El 45% de los hospitales registra eventos violentos, un tercio de las camas hospitalarias no están operativas y el 67% de los centros sufren fallos en el servicio eléctrico y de agua, según denuncian las ONG.