Había una vez unos abuelos… ¡Y todavía los hay! Había una vez unos abuelos, ésos que siempre están cuando papá y mamá tienen poco tiempo; ésos que cantan canciones de cuna de otra época y que aún te suenan, aunque hayan pasado seis años... Ésos que se inventan trabalenguas sobre la marcha y no sabes cómo, y luego te dicen: «Ésta es como tu casa». Y no les importa si se la dejas un poco patas arriba, sólo un poco. Ésos que te entienden cuando tienes un berrinche y no te hacen preguntas. Ésos que, si lloras, te cogen en brazos, te hacen cosquillas y se te pasa todo. Y si tienes un amigo, lo quieren conocer; y si no tiene abuelos, entonces se vuelven abuelos suyos también.