Cuando empieza el show...
Mar SánchezRihanna, Britney Spears o Miley Cyrus son algunas de las grandes celebridades que hoy se destapan más que nunca ante las cámaras. Parece que no hay límites. ¿O sí?
Uno de los ejemplos más sonados lo encontramos en la gala MTV Video Music Awards de este año, a la que acudieron los cantantes más reconocidos del mundo. Un espectáculo sin límites, en el que destacó por polémica Miley Cyrus. La joven cantante de 21 años ofreció un show cargado de gestos sexuales mientras interpretaba su canción We Can’t Stop, acompañada de Robin Thicke. No ha sido la única ocasión; en los MTV Europe Music Awards del pasado noviembre se fumó un porro en directo. Y parece que la provocación y el destape le funcionan. Ha vendido más de 270.000 ejemplares en Estados Unidos de su disco Bangerz, nº 1 del ranking en iTunes en más de 70 países, incluido España. ¿Pero todo vale con tal de vender más?
Una cuestión que al parecer las propias artistas se plantean. Katy Perry lanzó recientemente unas palabras llenas de valentía en la emisora de radio NPR posicionándose en contra del excesivo uso de la desnudez: «Es triste recurrir a ese recurso para vender discos. No tengo que estar desnuda siempre para llamar la atención».
¿Pero hasta qué punto nos influyen estas actitudes? Según Iñigo Samaniego, psicólogo especializado en adolescentes, «los artistas son modelos que los jóvenes siguen hasta en la manera de vestir o de comportarse. Como es sabido, la adolescencia es un momento crítico, porque uno va construyendo su propia identidad. Así pues, el riesgo está en asumir esas actitudes como normales y tomarlas como ejemplo de vida».
Y los jóvenes, ¿qué dicen? Bel Sanz López, murciana y fan de Miley, opina que lo que pretende es romper como princesa Disney. «Yo personalmente no lo haría, pero me gusta tanto que la perdonaría», asegura. Isabel Cánovas, también murciana y estudiante de economía, critica su comportamiento: «Todo es una estrategia de marketing; lo único que quiere es mantenerse en el mercado».
Por contra, en España encontramos el exitoso programa «La Voz» posicionado como uno de los mejores shows de entretenimiento musical. Aquí el físico es lo de menos, lo que se valora es la voz y el carisma del propio cantante.
Iñigo Samaniego aclara que sería importante presentar modelos con valores positivos, con metas que el adolescente busque en ese momento para su desarrollo y actitud personal. Si bien es verdad que los jóvenes tienen que ser capaces de discernir, los cantantes, especialmente las celebridades como Miley Cyrus, Rihanna o Britney Spears han de ser conscientes de que tienen un gran poder, pero también una gran responsabilidad.
LÉANOS
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