Las últimas medidas del Gobierno contra el paro juvenil nos recuerdan la complicada situación laboral y económica que vivimos...
Las últimas medidas del Gobierno contra el paro juvenil nos recuerdan la complicada situación laboral y económica que vivimos. Cada vez es mayor el número de jóvenes que a pesar de su buena formación, esfuerzo y ganas de empezar una nueva etapa no encuentran trabajo, porque no lo hay. Así lo demuestran las cifras: 2012 cerró con una tasa de desempleo juvenil en menores de 25 años del 55,13%. El miedo al fracaso está en el ambiente: «¿Tendré que irme de España?», «¿Habrá salidas para lo que estudio?». Es más: «¿Merece la pena seguir estudiando?», «¿Para qué?». Éstas y otras preguntas martillean a los jóvenes. Pero dentro de toda crisis hay algo positivo. Según afirma Ángel Hurtado, de Granada: «Nos hace más fuertes, luchadores, y nos despierta: ¡tenemos que labrarnos un futuro!». Maritxu Fuentes, estudiante de 1º de Medicina, señala con preocupación los elevados recortes en Sanidad, porque «no afectarán sólo a los profesionales, sino lo que es peor; a los pacientes». Y señala con decisión que «tenemos que ser nosotros los que saquemos al país de la crisis con trabajo y esfuerzo, no con paro y recortes». La Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) ha valorado positivamente las 50 primeras medidas adop-tadas por el Gobierno, entre las que destacan las orientadas a incentivar la financiación, el emprendimiento y los contratos de prácticas. A partir de ahora, contratar a jóvenes menores de treinta años conllevará una bonificación de 500 a 700 euros para la empresa y se buscará compatibilizar el cobro del paro con un salario cuando empiecen a trabajar.