logoIntroduzca su email y recibirá un mensaje de recuperación de su contraseña






                    




articulo

Palabra de vida

Chiara Lubich

«Dios habitará con ellos; ellos serán su pueblo». (cf. Ap 21, 3)
Del 18 al 25 de enero en muchas partes del mundo se celebra la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos, mientras que en otras se celebra en Pentecostés. Chiara Lubich solía comentar la cita bíblica elegida cada año para esta ocasión mediante la Palabra de vida del mismo mes. Este año la frase bíblica para la Semana de Oración es «Vosotros sois testigos de todas estas cosas» (Lc 24, 48). Para ayudarnos a vivirla proponemos este texto de Chiara como “llamada apremiante” a que nosotros, cristianos, demos juntos testimonio de la presencia de Dios en el mundo. «¡Ésta es la morada que Dios ha establecido entre los seres humanos! Él habitará con ellos, ellos serán su pueblo y Él será el Dios-con-ellos» (Ap 21, 3). La Palabra de Dios de este mes nos interpela. Si queremos formar parte de su pueblo, deberemos dejarlo vivir entre nosotros. Pero ¿cómo puede ser eso? Y ¿cómo saborear un poco ya desde esta tierra esa alegría sin fin que brotará de la visión de Dios? Eso es precisamente lo que Jesús nos reveló; ése es precisamente el sentido de su venida: comunicarnos su vida de amor con el Padre para que la vivamos nosotros también. Los cristianos podemos vivir esta frase ya desde ahora y tener a Dios entre nosotros. Tenerlo entre nosotros requiere ciertas condiciones, como afirman los Padres de la Iglesia. Para S. Basilio es vivir según la voluntad de Dios; para S. Juan Crisóstomo es amar como amó Jesús; para S. Teodoro Estudita es el amor recíproco; y para Orígenes es el acuerdo de pensamiento y de sentimientos para llegar a la concordia que «une y contiene al Hijo de Dios» (2). En las enseñanzas de Jesús está la clave para que Dios habite entre nosotros: «Amaos unos a otros como ya os he amado» (cf. Jn 13, 34). El amor recíproco es la clave de la presencia de Dios. «Si nos amamos los unos a los otros, Dios permanece en nosotros» (1 Jn 4, 12), porque «donde están dos o tres reunidos en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos» (Mt 18, 20), dice Jesús. «Dios habitará con ellos; ellos serán su pueblo». Por lo tanto, no está tan lejos ni es inalcanzable el día que marcará el cumplimiento de todas las promesas de la Antigua Alianza: «Mi morada estará junto a ellos. Yo seré su Dios y ellos serán mi pueblo» (Ez 37, 27). Todo se cumple ya en Jesús, que después de su existencia histórica, sigue estando presente entre los que viven la nueva ley del amor mutuo, es decir, la norma que los constituye en pueblo, el pueblo de Dios. Esta Palabra de vida es, pues, una llamada de atención apremiante, sobre todo para nosotros los cristianos, para que demos testimonio de la presencia de Dios con el amor. «Vuestro amor mutuo será el distintivo por el que todo el mundo os reconocerá como discípulos míos» (Jn 13, 35). Vivir el mandamiento nuevo de esta manera pone las premisas para que se concrete la presencia de Jesús entre los hombres. No podemos hacer nada si esta presencia no está garantizada, una presencia que da sentido a la fraternidad sobrenatural que Jesús ha traído a la tierra para toda la humanidad. «Dios habitará con ellos; ellos serán su pueblo». Pero nos corresponde especialmente a los cristianos, aunque pertenezcamos a distintas comunidades eclesiales, mostrar al mundo el espectáculo de un solo pueblo compuesto por todas las etnias, razas y culturas, por mayores y pequeños, enfermos y sanos. Un único pueblo del que se pueda decir, como de los primeros cristianos: «Mira cómo se aman y están dispuestos a dar la vida el uno por el otro». Éste es el “milagro” que la humanidad aguarda para poder seguir teniendo esperanza, y una aportación necesaria para el progreso ecuménico, para el camino hacia la unidad plena y visible de los cristianos. Es un “milagro” a nuestro alcance, o mejor dicho, al alcance de Aquel que, habitando entre los suyos unidos por el amor, puede cambiar la suerte del mundo y llevar a la humanidad entera hacia la unidad. 1) Palabra de vida de enero de 1999, publicada en Ciudad Nueva, nº 350, enero de 1999. 2) Comment. In Math., XIII, 15, PG 13, 1131. PUNTOS RELEVANTES: –Si queremos formar parte del pueblo de Dios, dejemos que Él viva entre nosotros. –Esta Palabra nos llama a dar testimonio de la presencia de Dios mediante nuestro amor mutuo: «Si nos amamos unos a otros, Dios permanece en nosotros», dice el evangelista Juan. –Incluso aunque pertenezcamos a diferentes comunidades eclesiales, debemos ofrecer al mundo el espectáculo de un solo pueblo del que pueda decirse: ¡Mirad cómo se aman! –La presencia de Jesús en medio de nosotros nos guía hacia este «milagro» de la unidad plena y visible de los cristianos. PARA PROFUNDIZAR EN LOS LIBROS DE CHIARA LUBICH: –Escritos espirituales/1 (EE/1): «Si tu ojo es sencillo», p. 155 (Pensamientos) (cf. La doctrina espiritual, p. 127). –Escritos espirituales/2 (EE/2): «Perfectos en el amor», p. 49 (Saber perder); «Lo esencial de hoy», p. 146 (Sí, sí; no, no) (cf. DE, p. 97); «Cristianos subdesarrollados», p. 155 (Sí, sí; no, no) (cf. DE, p. 336); «Enciendes una célula viva», p. 161 (Sí, sí; no, no) (cf. «Resurrección de Roma», en La doctrina espiritual, p. 234); «Lo sabe todo», p. 210 (Sí, sí; no, no). –Escritos espirituales/3 (EE/3): «Dios», p. 22 (Que todos sean uno); «Donde dos o tres están unidos en mi nombre…», p. 161 (Donde dos o tres). –Meditaciones (10ª ed.): «Una miríada de perlas espléndidas», p. 64 (cf. La doctrina espiritual, p. 161); «Lanzados al infinito», p. 68 (cf. DE, p. 168); «Nuestra responsabilidad es grande», p. 94 (cf. DE, p. 202). –La vida, un viaje: «Dar vida a Jesús entre nosotros», p. 26; «Restablecer siempre la unidad», p. 150. LECTURA RECOMENDADA ESTE MES: Marisa Cerini, «Dios Amor en la experiencia y en el pensamiento de Chiara Lubich». Este estudio pone de manifiesto la riqueza de sabiduría y de doctrina teológica que contiene el carisma dado por Dios a Chiara Lubich para los hombres y mujeres de nuestro tiempo.



  SÍGANOS EN LAS REDES SOCIALES
Política protección de datos
Aviso legal
Mapa de la Web
Política de cookies
@2016 Editorial Ciudad Nueva. Todos los derechos reservados
CONTACTO

DÓNDE ESTAMOS

facebook twitter instagram youtube
OTRAS REVISTAS
Ciutat Nuova